En las últimas décadas, la industria de la moda ha incrementado los niveles de producción hasta tal punto que se ha convertido en una de las industrias mundiales con mayor impacto negativo en el medio ambiente. Sin embargo, a pesar de este crecimiento en la producción, los márgenes de beneficio de los principales minoristas de indumentaria han disminuido considerablemente en los últimos años, debido a los precios más bajos y la pérdida de ingresos por exceso de existencias, desabastecimientos y devoluciones.
Según el último informe de la Fundación Ellen MacArthur (2021), los nuevos modelos comerciales circulares, como la reventa, el alquiler, la reparación y la reconstrucción, presentan una oportunidad para desvincular las corrientes de ingresos de la extracción de recursos, es decir: obtener más ingresos con menos productos nuevos , aprovechando todo lo que ya se ha invertido en la producción. Las menores necesidades de materias primas implican reducir los desechos y la contaminación al tiempo que se enfrentan a otros desafíos ambientales impulsados por estos principios: eliminar los desechos y la contaminación, hacer circular los productos y materiales y regenerar la naturaleza.
Como se indica en el artículo de la Fundación Ellen MacArthur, “los modelos comerciales circulares representan una oportunidad significativa para un nuevo y mejor crecimiento en la industria de la moda porque desacoplan las fuentes de ingresos de la producción y el uso de recursos, como la reventa de acciones no vendidas”.
Ésta es una de las principales razones por las que estos nuevos modelos circulares tienen el potencial de crecer del 3,5% del mercado mundial de la moda actual al 23% en 2030 y seguir creciendo a medida que los clientes abandonan cada vez más las viejas formas de consumir moda y se vuelven más conscientes del medio ambiente.
Economia circular
La Comisión Europea presentó en marzo de 2020 un nuevo Plan de Acción de Economía Circular que incluye propuestas para el diseño de productos más sostenibles, la reducción de residuos y el empoderamiento de la ciudadanía.
La economía circular es un modelo de producción y consumo que abarca la reventa, el intercambio, el arrendamiento, la reutilización, la reparación, la restauración y el reciclaje de productos y materiales existentes tantas veces como sea posible. Contrasta fuertemente con el modelo económico lineal tradicional, basado principalmente en el concepto de ‘usar y disponer’.